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Publié le 18/01/18

Mientras estaba listo para afrontar un nuevo desafío en la GP3 Series, la joven esperanza francesa Dorian Boccolacci mostró otro lado de su talento durante el Trofeo Andros en Isola 2000. Fue invitado a último minuto y no tardó mucho en comprender las reglas de la competición sobre hielo dominando claramente su categoría desde el segundo día para terminar en el escalón más alto del podio.

 

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Este luchador nato reemplazó en un abrir y cerrar de ojos al piloto del coche n° 5 del equipo SPI Logistic en el ámbito del Trofeo Andros Enedis dedicado a los coches eléctricos. Esta serie monotipo, que debutó hace más de diez años, vio ganar a grandes campeones como Loïc Duval, Romain Grosjean, Stépahne Ortelli, Simon Pagenaud, Nicolas Prost o Benoit Tréluyer antes de convertirse hoy en un verdadero vivero de jóvenes talentos.

 

Desde el inicio de este trofeo, el Andros car 04 ha evolucionado muy claramente. Ya se trata de un verdadero coche de carrera de dos ruedas motrices con propulsión posterior capaz de alcanzar los 160 km/h sobre el hielo con neumáticos con clavos. En esta competición se afrontan especialistas del hielo como Christophe Ferrier, cuatro veces ganador, Aurélien Panis, líder actual o su rival directo Vincent Beltoise. Presente en la competición por primera vez el dos veces campeón de Alemania DTM y el piloto en el campeonato mundial FIA de Rallycross Timo Scheider.


Con una experiencia de pocos entrenamientos de invierno durante los años pasados en Finlandia, Dorian afrontó este nuevo desafío con gran fluidez como siempre. Progresó muy rápidamene en los 800 metros del trazado en altura en los Alpes Marítimos, y ya a partir del viernes 12 de enero estaba entre los 4 mejores de la carrera 1. Demostró una gran confianza tras la fase de descubrimiento y al día siguiente pasó a la marcha superior alcanzando una ventaja en las sesiones de clasificación y marcando dos veces el mejor tiempo. Siguió expresándose al máximo en la Carrera 2 alcanzando la primera posición con un amplio margen. Se trató de una victoria extraordinaria con una ventaja de más de 6" sobre Vincent Beltoise.


"Viví una experiencia maravillosa conduciendo un coche eléctrico sobre hielo", declaró Dorian. "No es una superficie que conocía, pero mientras conducía siempre tuve buenas sensaciones. Estoy muy satisfecho de haber podido demostrar que soy capaz de adaptarme muy rápidamete a estas condiciones extremas y me divertí mucho sobre el hielo. Ganar delante de los mejores especialistas de la disciplina, en mi primera participación, fue para mí una gran satisfacción. Es una buena señal para la importante temporada que quisiera empezar en la GP3 Series, con espíritu ganador".

 


© Photos Trophée Andros - B. BADE

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